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Arquitectos: Steverlynck+Iglesias Molli Arquitectos
- Área: 345 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Francisca Steverlynck
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Proveedores: Etex, Hunter Douglas, AutoDesk, Eternit, Kenya Muebles, Lumishop, Patagonia Flooring
Descripción enviada por el equipo del proyecto. A partir de la encomienda del proyecto de un conjunto de viviendas sobre un terreno donde funcionaba un vivero de orquídeas, se realizó un relevamiento de las construcciones existentes a fin de evaluar el estado y capacidad de adecuación de los edificios al programa de necesidades establecido.
Si bien el edificio carecía de un valor patrimonial y su estado de conservación era muy precario, había un claro propósito de adecuación y puesta en valor del mismo a fin de referenciar el proyecto con su connotación histórica: “El Vivero”.
El edificio existente era un antiguo invernáculo de 2 plantas. En la planta baja se alojaba el sistema de bombeo, la caldera y depósitos de herramientas. En la Planta superior funcionaba un invernáculo donde se producían los almácigos de las orquídeas para luego ser trasplantados a los viveros de cultivo. Un sistema de acequias elevadas recibía el agua de lluvia de los techos de los viveros de cultivo para conducirla a reservorios enterrados para el riego de las orquídeas.
La refuncionalización del edificio debía contemplar un espacio multiuso para alojar inicialmente la oficina comercial del desarrollo, para luego, con el emprendimiento consolidado mutar a un espacio común de Co-working.
La intervención preliminar fue despojar al edificio de todas las construcciones e instalaciones precarias, quedando al desnudo una estructura de hormigón, ladrillo y carpinterías de perfiles de hierro. Se desmantelo el techo de la planta alta y se consolido el basamento de soporte con refuerzos en las líneas de apoyo. Se construyó una estructura de perfiles de hierro y tubos estructurales, conformando una trama estructural autónoma que delineaba el nuevo espacio en la planta alta.
Ambos extremos del volumen a dos aguas se resolvieron con carpinterías integrales de vidrio repartido remarcando los sectores de acceso y generando la transparencia longitudinal del edificio.
Sobre la fachada Norte se unificaron las ventanas existentes para generar un vano lineal que enmarca el espacio exterior.
La Planta Baja se acondiciono para resolver distintos espacios de Co-work y sala multimedia con un pequeño núcleo sanitario de baño y office.
La nueva estructura de la planta superior se integró al basamento del antiguo galpón a través de un revestimiento integral realizado con lamas cementicias prensadas (siding) colocadas verticalmente y que envuelven las paredes y el techo conformando un monovolumen que le brinda unidad al edificio. Estas lamas se separan entre sí, funcionando como una fachada ventilada dejando pasar el agua en el sector de la cubierta a un bajo techo con aislación térmica, membrana impermeable y canaletas ocultas.
Una rampa exterior abraza en su recorrido panorámico al monovolumen para resolver la vinculación externa de ambas plantas y la accesibilidad a personas discapacitadas al espacio multiuso de la planta alta. La rampa es contenida por una grilla de tubos que conforman virtualmente un nuevo volumen que se va recortando geométricamente evidenciando su desarrollo ascendente. Esta grilla de tubos pintados de negro refuerza el contraste con el volumen principal, y actúa como baranda de la rampa y como quiebra vista y control solar de las oficinas de multimedia en planta baja.
La chimenea de acero inoxidable de una vieja caldera se restauró para afianzar como un centinela el hito referencial del edificio.